Hoy, The Wall Street Journal publicó un artículo sobre la investigación interna que estamos llevando a cabo para comprender la experiencia de los jóvenes en Instagram. Si bien el artículo se centra solo en un grupo de conclusiones y las analiza desde una perspectiva negativa, apoyamos esta investigación, porque demuestra nuestro compromiso con el objetivo de comprender los problemas complejos y difíciles a los que se enfrentan los jóvenes, y orienta todo el trabajo que realizamos para ayudar a las personas que sufren estos problemas.
Muchas personas se preguntan si los medios sociales son buenos o malos, pero no hay una única respuesta; pueden ser las dos cosas. En Instagram, analizamos los beneficios y los riesgos de lo que hacemos. Nos enorgullece que nuestra app ofrezca una plataforma para que las personas marginadas puedan expresarse, que fomente cambios en la sociedad y ayude a amigos y familiares a mantenerse conectados sin importar en qué parte del mundo estén. Sin embargo, también sabemos que puede ser un lugar donde las personas tengan experiencias negativas, tal como se afirmó en The Wall Street Journal. Nuestra tarea es asegurarnos de que las personas se sientan bien con respecto a la experiencia que ofrece Instagram, y lograr ese objetivo es muy importante para nosotros.
La internet aumentó increíblemente la cantidad de personas con las que nos conectamos y la cantidad de información que consumimos. Como sociedad, aún estamos tratando de entender cómo procesar estos cambios y qué es lo más adecuado para cada uno de nosotros. En Instagram, contratamos a los mejores investigadores y científicos posibles para que analicen estos cambios y nos ayuden a comprender cómo afectan a las personas. También consultamos a los mejores especialistas e investigadores del mundo para que nos ayuden a ver más allá de nuestro propio trabajo.
Las investigaciones externas sobre el impacto que tienen los medios sociales en las personas aún son incipientes y están en evolución. Además, los medios sociales cambian rápidamente. Algunos investigadores sostienen que necesitamos más pruebas para comprender el impacto de los medios sociales en las personas. Todas las investigaciones tienen limitaciones y salvedades, por lo que ninguna es concluyente. Tenemos que basarnos en un conjunto de investigaciones multimetódicas y en constante crecimiento, además de los aportes que pueden hacer los especialistas.
Los resultados de las investigaciones sobre el efecto de los medios sociales en el bienestar de las personas no son uniformes, y nuestra investigación se condice con las investigaciones externas. Los medios sociales no son inherentemente buenos ni malos para las personas. A muchas, les resultan útiles un día y problemáticos al día siguiente. Al parecer, lo más importante es cómo se usan los medios sociales y el estado de ánimo de las personas cuando los usan.
En una investigación multimetódica de Harvard, se describió la experiencia que tienen los jóvenes estadounidenses en los medios sociales como un "sube y baja" de emociones positivas y negativas. Una persona puede tener una conversación importante con un amigo un día y, al día siguiente, pelearse con esa misma persona. Según una investigación de Pew Internet sobre los jóvenes en EE. UU., el 81% de los adolescentes afirma que los medios sociales los hacen sentir más conectados con sus amigos, mientras que el 26% sostiene que los medios sociales los hacen sentir peor con sus vidas.
Nuestros resultados fueron similares. Muchas personas dijeron que Instagram las hace sentir mejor o que no las afecta, pero otras, en especial las que ya se sentían mal, dijeron que Instagram puede empeorar su situación. En el mundo de la investigación, esto no sorprende. Dado que la comparación social negativa y la ansiedad existen en el mundo, lógicamente también existen en los medios sociales. Eso no cambia el hecho de que tomamos estos resultados con seriedad. Por eso, creamos una iniciativa para tomar medidas como respuesta a esta investigación y mejorar Instagram.
Con el objetivo de que Instagram sea un espacio seguro y solidario para todas las personas, tomamos varias medidas para abordar el bullying, el suicidio y las autolesiones y los trastornos alimenticios. Sobre la base de nuestra investigación y los comentarios de los especialistas, desarrollamos funciones para ayudar a las personas a protegerse del bullying, brindamos a los usuarios la opción de ocultar los recuentos de Me gusta y seguimos conectando a las personas que atraviesan situaciones difíciles con organizaciones de asistencia locales.
Nos estamos centrando cada vez más en abordar la comparación social negativa y la imagen corporal negativa. Una idea que creemos que podría ayudarnos con nuestro objetivo es buscar oportunidades para intervenir si vemos que una persona dedica demasiado tiempo a ciertos tipos de contenido. Gracias a nuestra investigación, estamos empezando a comprender cuáles son los tipos de contenido que las personas creen que contribuyen a las comparaciones sociales negativas y estamos buscando formas de invitarlas a mirar contenido sobre otros temas si notamos que consumen repetidamente ese tipo de contenido. Siendo un poco optimistas, creemos que esto ayudará a dirigir a las personas a contenido que las inspire o mejore su estado de ánimo, y, en mayor medida, también ayudará a modificar esa parte de la cultura de Instagram que se centra en la apariencia de las personas.
También queremos ser más transparentes en relación con las investigaciones que llevamos a cabo, tanto de manera interna como en colaboración con investigadores externos. Seguiremos buscando oportunidades para trabajar con más socios a fin de publicar investigaciones independientes sobre este tema. Asimismo, estamos buscando alternativas para que los investigadores externos puedan acceder a más de nuestros datos sin vulnerar la privacidad de las personas. Pronto podremos compartir más información sobre nuestra investigación y las nuevas funciones que estamos desarrollando.
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